Tengo un diario.

Lo tengo desde el dìa en que casi me atraganto por un pedazo de carne. No es por nada pero quiero dejar un testimonio escrito sin miedos. En el escribo cosas sobre mi rutina, mis personas, mis accidentes y lecturas. No pongo fotos ni dibujitos, eso de hacer casi scrapbooks no se me dá. Es verde con el lomo café. Sus hojas son recicladas.

En un rato creo que iré a comer el restaurante vegetariano con Enrique. Tengo poco dinero pero quiero darme el lujo. Tuve una semana pesada pero productiva. Las clases de miércoles a sábado están bien: Lecturas largas con Anaya Wittman, cerámica con Ramírez Malo, convertir fotografías y dibujos análogos para elaborar obra y diseños digitales con el profe de Sistemas que no me he aprendido su nombre, inscribirme en el curso de fotografía contemporánea tambien.

Tengo la impresión de que vienen muchas cosas dificiles de soportar pero no me quiero programar.

Por el momento todo marcha bien, los dìas han estado muy nublados y llueve casi todas las noches. El clima en las mañanas es frío.

Es dificil escribir en el blog despues de escribir tan libremente en mi diario. No sé si vaya a dejar este espacio pero quiero descanzar un poco. Tal vez siga subiendo algunas fotos pero me siento algo cansado.

Bueno, sólo actualizaba.